Casi un 20 % de los pedidos en 2023 utilizaron combustibles alternativos

30 de abril de 2024

2023 fue un año en el que se contrataron un total de 298 buques con capacidad para utilizar combustibles alternativos, lo que supone un crecimiento del 8 % respecto a 2022. Son datos publicados por la plataforma Alternative Fuels Insight (AFI) de la sociedad de clasificación DNV. El 80 % de las nuevas construcciones en 2023 fueron destinadas a buques con propulsión convencional, es decir, el 85 % del total de embarcaciones en cartera y el 99 % de la flota mercante en todo el mundo.

Entre los combustibles alternativos, destaca por encima de todas las nuevas construcciones de buques propulsados por metanol, con un total de 138 unidades, cifra que supera las 130 contrataciones de buques GNL. 2023 también fue un año que marcó el pistoletazo de salida para otro de los combustibles alternativos como es el amoniaco, con 11 pedidos en total.

DNV habla también en su plataforma AFI sobre la cada vez mayor presión para reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI), en el que la Organización Marítima Internacional (OMI) ya ha establecido criterios más estrictos el pasado mes de julio de 2023. Por esta razón, el sector marítimo alude a varias alternativas para la descarbonización de sus buques.

El combustible alternativo por excelencia en 2023 fue el metanol con 138 pedidos de nuevas construcciones que serán propulsadas por dicho combustible. Este dato supone un gran aumento respecto a las 35 unidades encargadas en 2022 (estos datos incluyen también las remotorizaciones de buques ya existentes).

Por tipo de buques, de las 138 nuevas contrataciones de buques propulsados por metanol, el 77 %, es decir, 106 unidades fueron portacontenedores.

Tras el metanol se sitúa el gas natural licuado (GNL) con 130 nuevos pedidos en comparación con los 222 de 2022. Cifra que puede ser engañosa ya que, si se tienen en cuenta únicamente los buques de nueva construcción, el GNL sería el combustible alternativo más utilizado en la construcción de nuevas unidades, ya que una gran parte de los pedidos para el uso de metanol como combustible fueron modificaciones de buques ya existentes.

Basta el siguiente dato: el año pasado se superó la barrera del millar de buques propulsados por gas natural licuado (excluidos los metaneros), lo que demuestra la importancia de este combustible alternativo en la transición energética marítima hacia combustibles menos contaminantes.

Por tipos de buques propulsados por GNL, en 2023 se contrataron 48 portacontenedores, 40 buques para el transporte de carga rodada y 30 petroleros.

Además del metanol y el gas natural licuado, cabe destacar el amoniaco (11 pedidos en 2023) y el hidrógeno con tan solo 5 pedidos también en 2023 respecto a los 18 que tuvo en 2022.