El Consejo del Gobierno andaluz aprobó el 15 de septiembre el Decreto Ley de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible por el que se procede a una reprogramación del plan financiero del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP) para ayudar a las empresas del sector de la acuicultura, tanto marina como continental, a hacer frente al impacto sufrido por la pandemia provocada por la COVID-19. La acuicultura marina y continental es un sector productivo de competencia exclusiva de la comunidad autónoma, junto con la pesca en aguas interiores y el marisqueo.
La norma responde a la autorización que ha aprobado el Consejo de Ministros de la Unión Europea, a través del Reglamento del pasado 23 de abril de apoyo al sector de la pesca y la acuicultura especialmente afectados por la pandemia. En este caso, la Junta de Andalucía ha dotado con 1,5 millones de euros una medida destinada a compensar a las empresas de acuicultura por la caída de ventas desde el inicio del estado de alarma hasta el 31 de julio.
El Decreto pretende ayudar a sostener la continuidad de la empresa, evitando el cese definitivo de la actividad y la destrucción de empleo. La acuicultura se vio especialmente afectada por las perturbaciones del mercado generadas por un descenso significativo de la demanda por el cierre de puntos de venta, mercados y tiendas y especialmente por el cese del canal Horeca.
La subvención consistirá en el pago de un máximo del 50 % de la disminución del ingreso por ventas, entre el 14 de marzo y el 31 de julio de 2020 respecto a la media del mismo período de los tres años anteriores o respecto a la misma horquilla temporal del año anterior para las empresas con tres o menos años de actividad y hasta un máximo de 150.000 euros por empresa. Estas ayudas están cofinanciadas por el FEMP y la Junta de Andalucía en un 75 % y un 25 %, respectivamente.
Andalucía cuenta con casi un centenar de empresas del sector de la acuicultura que generan más 1.000 empleos directos. En 2019 la producción superó los 10 millones de kilos por un valor de más de 73 millones de euros. Las principales especies producidas son la lubina, la dorada, el atún, el mejillón, el lenguado o las lisas, entre otras. Dos terceras partes son instalaciones en mar abierto situadas mayoritariamente en la zona mediterránea, y el resto en zonas terrestres que ocupan más de 7.500 hectáreas, principalmente en marismas y esteros de la bahía de Cádiz, desembocadura del río Guadalquivir y en la costa occidental de Huelva, entre los ríos Piedras y Carreras.